jueves, 18 de agosto de 2011

La gestión interactiva de la cultura europea: El nuevo reto del siglo XXI


En medio del fuerte debate en relación al canon digital y las nuevas formas de propiedad intelectual a través de las redes de internet, la Agencia Digital Europea ha elaborado el “Informe Nuevo Renacimiento” para animar a todos los todos los países a hacer un esfuerzo y volcar en la Red todo su patrimonio cultural de dominio público en los próximos cinco años. El Informe pretende impulsar a las industrias culturales del siglo XX a aceptar la realidad de Internet y sumarse a los nuevos modelos de explotación. Propone una revisión del concepto actual de propiedad intelectual que obre en favor de los usuarios, ya que el acceso a los fondos digitalizados sería abierto y las obras incluidas en ellos quedarían a disposición del público de manera gratuita. 

De este modo la Unión Europea ha abierto el debate sobre la necesidad de entrar en la era digital con todo su bagaje cultural guardado en servidores de internet y la comercialización con el sector privado de las obras culturales que no explotan en la actualidad.

El objetivo de esta iniciativa es corregir muchas situaciones actuales donde hay una baja oferta de contenidos en la Red, que se suplen con distribuciones ilegales y nocivas para los intereses de empresas como editoriales, casas discográficas, etc., que las tildan de piratería. En el caso de las obras llamadas "huérfanas", es decir, que a pesar de tener Copyright no se puede pactar autor porque ha desaparecido o está ilocalizable, la propuesta de la Comisión pretende dotar de rudimentos jurídicos a los estados para poder negociar su inclusión en los fondos. En la actualidad, tras cinco años sin reclamar sus autores beneficios, estas obras pasan a ser propiedad de las entidades de gestión. Entre los impulsores del proyecto se destaca que la conversión de las principales obras culturales europeas en formato digital puede ser fuente de nuevos modelos de explotación que traigan riqueza y trabajo en las diferentes regiones de la Unión Europea. (http://ec.europa.eu/culture/pdf/report_Comite_des_Sages.pdf)

Se trata en definitiva, de establecer un sistema de gestión a nivel europeo de la extensa riqueza cultural al servicio de los ciudadanos

No es la primera vez que la Unión Europea hace frente a esta cuestión. En 2008 se puso en marcha el proyecto Europeana con la intención de crear un gran fondo cultural europeo en Internet que sirviera para agregar los fondos de los respectivos países (http://www.europeana.eu/portal/)


Si bien el crecimiento sigue el ritmo estipulado, con más de quince millones de contenidos ditigalizados y gestionados, parece que no ha cuajado entre los usuarios dada la falta de noticias y de conocimiento del uso de esta herramienta. El objetivo de estar en pleno funcionamiento en 2010 se ha cumplido, pero la usabilidad del portal dista de ser óptima y no hay demasiadas herramientas para buscar entre su ingente catálogo.
Debido a ello, la experiencia de usuario no es satisfactoria y éste recibe poca información adicional sobre los contenidos que se le ofrecen. Asimismo, comentarios de los usuarios ponen de manifiesto problemas de acceso a los contenidos una vez localizados, ya que su reproducción depende en última instancia del portal del Estado miembro que los haya digitalizado, con lo que su calidad es muy variable. Como síntoma de su baja popularidad se puede citar el número de "amigos" que tiene el portal en Facebook: menos de 7.300 personas entre una población de más de 500 millones de europeos de la Unión. (http://www.facebook.com/Europeana)


Frente a esta iniciativa, Google Libros ya lleva más de diez millones de escritos y obras digitalizadas, tanto del dominio público (mediante acuerdos con universidades y bibliotecas) como del privado (mediante acuerdos con editoriales y autores).  A pesar de las criticas recibidas por este sistema de gestión de libros y otro tipo de obras por su ataque a los derechos de propiedad intelectual, el hecho es que las cifras avalan su popularidad entre los usuarios de la red y suponen el principal escollo al que se enfrenta la iniciativa europea.

A tal efecto, recientemente la Unión Europea ha convocado el Hack4Europe (http://www.version1.europeana.eu/web/api/hackathons) que aspira a dar mayor visibilidad a los 18 millones de fondos disponibles, tres millones de ellos con licencias libres, en Europeana, y parece que lo están consiguiendo (http://caldocasero.blogspot.com/2011/05/hack4europe-bcn-en-el-museo-picasso-8-y.html)

El objetivo del concurso es doble: “les invitamos a crear aplicaciones para que nos ayuden a dar más visibilidad a Europeana y, de paso, mostramos a los gestores culturales la importancia de abrirse al mundo tecnológico para fomentar la innovación", explica Milena Popova, responsable de mercadotecnia de Europeana. Hack4Europe, que premia el potencial comercial, impacto social y la innovación, también fomenta la integración con otras plataformas abiertas en Internet, como Wikipedia. En este sentido, es posible ver en el museo Picasso barcelonés desde un buscador de imágenes, que después se pueden subir a la enciclopedia libre, hasta funcionalidades para referenciar correctamente y mediante vínculos hipertextuales la procedencia de obras disponibles en Europeana y en múltiples idiomas.

El primer hack day para Europeana se celebró en el Instituto de la Imagen y el Sonido de Holanda el pasado abril. "El resultado fue espectacular. Los 32 desarrolladores participantes crearon 15 prototipos, desde aplicaciones para móviles Android hasta mashups para Wikipedia o buscadores por palabras clave o datos geográficos", explica Popova. 
(http://version1.europeana.eu/web/api/application-gallery;jsessionid=48739ADBCB11C3818E19E1DE28ADB2A3)

De este modo se hace palpable la necesidad cada vez más apremiante de crear nuevos sistemas de gestión de la información eficaces, esto es, que no sean únicamente capaces de gestionar de manera eficiente la cada vez mayor cantidad de datos e información disponibles, sino que lo hagan de un modo inteligente y sencillo para el consumidor. Con este tipo de iniciativas y plataformas desde mi punto de vista se pone al alcance de los ciudadanos una información hasta ahora vetada, si bien también se pone de manifiesto que una gran herramienta de gestión sin los elementos de éxito adecuados puede pasar desapercibida.

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