La venta on-line se
ha convertido actualmente en una de las herramientas más utilizadas por todos los
usuarios de la red. La facilidad con la que se puede comprar en internet y la gran variedad
de tiendas on-line, hacen que cada vez existan mayores adeptos a esta nueva forma
de “salir de compras”.
¿Pero, es esta nueva manera de comprar fiable?
A la hora de comprar en internet, nos podemos encontrar con grandes
desventajas que pueden ocasionar más de un disgusto al comprador:
En primer lugar y la más importante, la seguridad. Para poder
comprar tenemos que dar todos nuestros datos de tarjeta de crédito, lugar donde
vivimos… Estos datos pueden ser grabados para ser utilizados en nuestro nombre
sin nuestro consentimiento, el denominado robo de identidad. Además de poder tener la mala suerte de que nos roben nuestro dinero.
No podemos probar el producto antes de comprarlo. Ya sea por ejemplo
un pantalón, un perfume o un electrodoméstico. Nosotros como clientes nos
fiamos por lo tanto del establecimiento que nos vende el artículo.
No podemos comprar todos los productos que queramos. Es fácil comprar
prendas de ropa, si no nos gusta se devuelve en el momento de ir a recogerla, ¿pero,
y la comida?. Los productos frescos de comida se ponen malos si las condiciones
de envío no son las adecuadas, pero esas condiciones aumentan el precio del
producto, ¿merece la pena entonces?.
La entrega de productos no es instantánea, puede tardar varios días,
incluso semanas. Hay veces que no podemos esperar tanto tiempo por muy barato
que nos haya costado el producto.
Otra cuestión importante es, ¿existen todos los productos que se
venden? Hay páginas web de ropa, comida, electrónica... que por nuestro
conocimiento de la marca, su buena publicidad y reputación hacen que nos fiemos de ellos por completo a la hora de
comprar. Pero existen otras páginas que pueden colgar anuncios de compra/venta
en la que el producto no existe. Cada día hay nuevos clientes
engañados tanto porque el producto no existe como porque el producto que venden
ha sido robado anteriormente.
El fraude en España
a finales de 2012 era de alrededor un 8%, siendo uno de los países menos
afectados de la Unión Europea.
Hoy en día, los jóvenes entre 25-34 años son los que más usan el
comercio electrónico y lo que más compramos en la web son: viajes, alojamientos para vacaciones, coches de alquiler, entradas de
espectáculos, ropa, bienes de hogar, libros y revistas y equipamientos
informáticos y electrónicos.
Debemos concienciarnos bien de que el dato del
8% es un dato real, y que un día podemos ser nosotros parte de ese porcentaje que crece día tras día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario