Las fibras ópticas están revolucionando el mundo de las telecomunicaciones y la razón es bastante sencilla: si comparamos las fibras ópticas con el cable metálico convencional de cobre, el sistema óptico presenta innúmeras ventajas imposibles de superar.
Algunas de las principales ventajas de la fibra óptica: son más baratas (kilómetros de fibras pueden ser fabricadas por un coste menor, lo que refleja en ahorro para la empresa que te ofrece servicios de Internet y también en tu bolsillo), ocupan menos espacio, cuentan con mayor capacidad de transmisión y menor degradación de la señal, además de consumir menos energía.
En otras palabras, la fibra óptica te permite escuchar música y ver películas streaming en tiempo real y sin interrupciones, soporta formatos de alta calidad, permite una conexión a Internet más rápida, te permite hacer backups online y trabajar con tus archivos almacenados en la nube sin la necesidad de descargar documentos. Puedes realizar descargas en segundo plano de múltiples archivos y abrir múltiples sesiones de chat o videochat.
Otra gran ventaja es la posibilidad de conectar todos tus aparatos que necesitan conexión a Internet como el ordenador portátil de tu padre, el tuyo, de tu hermano, tu móvil, tablet, entre otros, sin perder la calidad de navegación y velocidad.
Es la mejor opción para suplir todas las necesidades que la evolución de la tecnología e Internet nos exigen a cada día.
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