miércoles, 5 de septiembre de 2012

¿Ocuparán las máquinas nuestro lugar?

Desde que comenzó la revolución industrial hasta nuestros días el conocimiento humano ha sufrido un crecimiento exponencial. Uno de los avances más relevantes que ha sufrido la humanidad es el de la automatización de diversos procesos, tanto a nivel empresarial como a nivel personal lo que ha producido mejoras en la eficiencia en numerosos campos.
Como consecuencia del desarrollo tecnológico los indicadores económicos y sociales han reflejado numerosas mejoras. En definitiva se puede asegurar que gracias al enorme desarrollo que el ser humano ha sido capaz de alcanzar en los países occidentales se han obtenido las mayores cuotas de bienestar de la historia.
Fruto del desarrollo las necesidades de empleo que los agentes económicos demandantes de trabajadores se han visto modificadas sustancialmente. Diversos estudios han analizado como las demandas de trabajadores necesarias para construir determinados bienes se han ido reduciendo significativamente, tal y  como podemos apreciar en la siguiente imagen (van Bieserbrocek, 2003) en la que se aprecia la evolución de la productividad de los fabricantes de automóviles japoneses entre 1963 y 1996 medida en el numero de empleados necesarios por vehículo construido:

Fuente: van Bieserbrocek, 2003
Los últimos avances de hoy eran la ciencia ficción de hace unas pocas décadas. Muchos de nosotros hemos crecido viendo series de televisión donde los coches conducían solos, y hoy eso es posible. En mayo de 2012 se anunció que el Estado de Nevada (Estados Unidos) había concedido la licencia de a Google para que su vehículo sin conductor pudiera conducir libremente por las carreteras del Estado. Aquellos que promueven este avance soportan su opinión en que la máquina podrá ser tan buena como lo es el mejor de los humanos. Insisten en que si esto fuera habitual y se expandiera esta tecnología el número de accidentes se reduciría significativamente ya que el sistema optimiza el rendimiento del vehículo frente a los riesgos que implica el hecho de desplazarse en coche.

Por otro lado, si se expandiera el hecho de que los coches circularan solos y de manera autónoma numerosas personas que se dedican al transporte verían eliminado su puesto de trabajo. Aquellos que desarrollan la tecnología de conducir avanzarían en conocimiento técnico mientras que el resto de la sociedad iría olvidando las normas básicas de conducir. Básicamente sería como externalizar en las máquinas la actividad de conducir.
¿Esto realmente mejora a la sociedad? ¿Estamos más cerca de delegar en las máquinas numerosas actividades?
Viendo esto no puedo más que recordar la película de Pixar Wall-E, donde se ve a los restos de la sociedad que vive completamente automatizada y dejando de lado completamente numerosas actividades que hoy consideramos cotidianas.
 Os dejo la charla publicada en TED sobre las bondades del vehículo sin conductor.
Bibliografía:
van Bieserbrocek, J 2003, 'Productivity Dynamics with Technology Choice: An Application to Automobile Assembly', Review Of Economic Studies, 70, 242, pp. 167-198, Business Source Alumni Edition, EBSCOhost, viewed 5 September 2012.

1 comentario:

Unknown dijo...

Vista la evolución y resultados de la incorporación de la tecnología al mundo actual, queda claro que dicha incorporación se hace imprescindible para mantenerse en los mercados actuales, independientemente de en cuáles se opere. La reducción de costes esta a la orden del dia y la incorporación de las nuevas tecnologías es una forma totalmente útil de enfocar dicho objetivo. Pero esto no puede ser único, hay cosas que nunca podrán ser sustituídas por la tecnología. No todo va a ser "objetivo" y la interpretación humana nunca podrá dejarse de lado. Por tanto, habrá determinados procesos que admitan el cambio, pero nunca podrá ser una sustitución total de todo lo anterior que hemos vivido.