Somos muchos los que con frecuencia
confundimos el Modelo de Negocio con el Plan de Negocio. Cabe matizar la diferencia entre estos dos
conceptos.
Los planes de negocio, han constituido
durante mucho tiempo la pieza clave que determinaba el éxito o fracaso de una
idea de negocio, y de lo que dependía principalmente la financiación que ibas
obtener para convertirte en emprendedor. En resumen, el Plan de Negocio
consiste en un documento escrito que describe todos los aspectos a tener en
cuenta en un negocio.
Por otro lado, ¿qué es un modelo de negocio?
El Modelo de Negocio establece las relaciones entre la creación, la entrega y
la captura de valor de un negocio o empresa. Este concepto, se ha convertido
con el paso del tiempo en uno de los ejes principales de las estrategias de las
empresas, y constituye una fuente de ventaja competitiva.
El problema fundamental de los planes de
negocio, es el futuro. Pueden hacerse predicciones a largo plazo, pero es bastante complicado acertar dado el entorno que nos rodea, en
constante cambio. Los planes de negocio
ofrecen una visión estática del negocio y es algo que proporciona seguridad, pero no deja de ser una fotografía de un negocio, y al final lo que cuentan son los resultados.
El mundo cambia, las personas cambian, y por
lo tanto las empresas para sobrevivir también tienen que cambiar. La necesidad de adaptarse, de cambiar o de innovar cada vez se hace más evidente. En algún punto de la vida de una compañía se plantean obstáculos para crecer, y estos vienen principalmente por su entorno, que ha cambiado. Cada día es más dificil encontrar soluciones a los retos que se plantean, y cuando al fin se consigue encontrar la solución, el problema ha cambiado.
¿Cómo integramos
lo anterior en el proceso/estrategia de negocio? Innovando en los modelos de negocio. Centremos nuestra
atención en la herramienta que marcada otra dirección en el desarrollo de
Business Models, el modelo Canvas, creado por Alexander Osterwalder. El modelo Canvas asume
el cambio y lo incorpora en el proceso. Esta herramienta permite la innovación,
saca nuestro lado creativo y nos permite descubrir caminos que de otra forma no
hubiésemos alcanzado. Puede utilizarse tanto en el diseño de un negocio nuevo o
bien para crear una nueva línea de negocio dentro de una empresa.
El esquema principal y los bloques a tener en
cuenta en el diseño de este modelo es el siguiente:
Como cada uno de nosotros, cada modelo de negocio es único, por lo que lo anterior solo debe considerarse como el punto de partida a partir del cual la idea que tenemos en la cabeza tomará forma.
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