domingo, 21 de julio de 2013

El futuro de las redes sociales


Si eres de derechas o izquierdas; cristiano, ateo o musulmán; trabajador o estudiante; deportista o fumador; casado, soltero o buscas un relación. Son algunas de las informaciones que los usuarios de las redes sociales suelen revelar, en muchos casos sin darse cuenta. 

El ser humano ha tenido siempre la imperiosa necesidad de relacionarse con su entorno. La amistad ha sido uno de los vínculos más fuertes que hemos conseguido crear con los demás, incluso más que las relaciones de pareja. No se ve enturbiada por instintos, sino que se forja con el tiempo y con la lealtad.

Con el desarrollo de las nuevas tecnologías las formas de mantener en contacto a las personas han evolucionado y se han creado nuevos vínculos que antes resultaban inexistentes. Gracias a Internet y a las redes sociales se ha producido no sólo un cambio social, sino también cultural.

Las relaciones parecen magnificarse y podemos saber en todo momento lo que hace cada uno. Años atrás, resultaba imposible mantener el contacto con personas que vivían lejos de nuestra ciudad, métodos como la correspondencia y el teléfono ayudaban pero eran realmente lentos y dificultaban su continuación.

La creación de las redes sociales trae consigo la inmediatez, todos parecen estar interactuando a nuestro alrededor a pesar de que hablemos de una persona que vive en Singapur.

Este tipo de conexiones personales no sólo nos permite tener relación con nuestras amistades, también crea la posibilidad de transmitir información entre desconocidos, agrupar a estos en grupos en función de sus gustos y aficiones. Redes como Twitter o Job and Talent nos abren las puertas a un mundo en el que las redes pueden aportarnos algo más que meras relaciones. Se crean páginas sociales especializadas en ciertos campos, que nos ayudan a encontrar trabajo y a las empresas a encontrar el perfil de trabajadores que están buscando.

En Twitter son muchos los políticos, escritores y artistas que comparten una franja de su vida en el que el seguidor puede mantenerse de manera anónima. Muestran opiniones, fotografías que los humanizan ante un público que siente a sus ídolos como alguien cercano a ellos.

Puede que este éxito nos parezca sorprendente, pero no podemos olvidar que el interés por lo ajeno ha estado presente durante la evolución de nuestra sociedad. La prensa rosa o sensacionalista ha sido habitual en nuestras vidas, siempre ha existido el deseo de saber que hacían los famosos con su vida. Ese deseo se ha transportado a algo más cercano a nosotros, con las redes sociales podemos en muchos casos ver la información de otras personas que se encuentran relacionadas con nosotros sin que ellos sepan. Compartimos nuestras fotografías, comentarios, anécdotas, actualizamos nuestra actividad para un público que muchas veces nos es desconocido. Nos gusta saber y que sepan  de nosotros, pero no nos gusta perder el anonimato en el proceso.

Uno de los principales problemas que observo en el futuro de las redes sociales es la intromisión tan profunda que hacen en la vida de las personas. Son un escaparate perfecto para las empresas de marketing y publicidad, cada usuario se convierte en un conejillo al servicio de los estudios de mercado. Al colgar nuestra vida en la red estamos aportando información de manera totalmente gratuita. Damos indicaciones de nuestros gustos, de los sitios en los que pasamos las vacaciones y cenamos, en que trabajamos…

La última moda en la red Facebook es hacerse fan de empresas y productos; con ello las compañías obtienen datos del target de mercado al que deben dirigirse pudiendo segmentar su publicidad y adecuarla.

La empresas ha tomado la red como una fuente de información adicional, son muchas las que en procesos de selección han utilizado los perfiles de las redes sociales para observar el comportamiento de los futuros empleados fuera del ámbito de trabajo. Han sido muchos los empleados que por ciertas fotografías han sido despedidos. ¿Hasta dónde algo de nuestra vida privada puede afectar en nuestro trabajo?

Hace unos años el gobierno alemán, fue muy tajante al respecto y ante el temor a una posible restricción de la libertad prohibió a las empresas buscar datos de los empleados en las redes sociales.

¿Hasta qué punto pueden este tipo de redes sociales llegar a controlar todos los ámbitos de nuestra vida?

3 comentarios:

Eva S. dijo...

Un artículo muy interesante.

Hace 10 años Facebook no existía y hoy esta constantemente en boca de todos: Si en 2011 fue multado con US$137.600 (una cifra insignificante) por almacenar información borrada de los usuarios (solicitudes de amistad rechazadas, personas eliminadas, historiales de conversación, etc.), en 2013 volvía a saltar a la prensa al afirmar que desde el 31 de diciembre del pasado año, había recibido entre 9.000 y 10.000 peticiones de información privada por parte de las autoridades americanas (desde solicitudes de la policía local hasta relativas a la seguridad nacional), cifras cuanto menos escalofriantes, si tenemos en cuenta dichas peticiones han afectado en torno a unos 20.000 usuarios...

Paloma Carmona Fernandez dijo...

Hoy en dia quien no está en las redes sociales parece no estar en el mundo. El problema está en que no nos damos cuenta que la informacion que subimos en ellas, ya sea informacion personal como fotos, se quedan en la red y hay personas profesionales (hackers) que se dedican a sacar toda posible informacion de todas las redes sociales, y nosotros pensando que esa informacion ya se borró hace un tiempo o ni te acuerdas de que la habias publicado.

Cano dijo...

En la sociedad actual donde nos encontramos, estamos viendo un gran cambio en la forma en la que nos relacionamos con los demás, nunca tuvimos esta clase de acceso a la vida de otros y cuando las personas utilizan los medios sociales irresponsablemente pueden aparecer problemas como los que comentas.

En primer lugar, pienso que cada uno de nosotros debemos de tener la consciencia de todo aquello que hacemos y subimos, o permitimos sea subido a alguna de las redes sociales. Quizás no tengamos en mente las consecuencias que un mal uso de las redes sociales nos pueden llevar a causas como el despido (en el trabajo), pero si que somos conscientes que estas mismas redes sociales nos pueden afectar en otros ambitos de nuestra vida (perder una relación ya sea de amistad, con tu pareja, etc) por lo que pienso que cada uno debemos de ser conscientes de todo aquello que hacemos y compartimos en internet.

Con esto no quiero decir que soy partidario de que las empresas urgen en las vidas personales de cada uno de sus trabajadores o potenciales trabajadores,ya que no debe de influir lo persnal para un buen desempeño laboral. Loúnico que digo es que debemos ser conscientes de que el mundo de internet llega mucho más haya de lo que nos imaginamos o que podamos conocer y por consiguiente deberíamos de ser cautos y no hacer un uso irresponsable de las redes sociales.