miércoles, 12 de junio de 2013

Cediendo mis datos a coste 0

Una foto, un estado, una entrada, un video... Las redes sociales son una continua fuente de la que influye información personal, que día a día transmiten multitud de datos a los usuarios. Puede ser que la imagen que se tuviese de una red social en sus inicios fuese únicamente la de subir un perfil donde la gente compartía lo que quería por entretenimiento y curiosidad.

Pero todo esto ha evolucionado hasta límites insospechados. Preguntemos a Mark Zuckerberg si pensaba que su pequeño portal para su Universidad llegaría a ser una de las empresas más valoradas del mundo, con millones de usuarios y derivaría en lo que es hoy en día. Y la pregunta es clara: ¿Por qué la red social "Facebook" ha conseguido llegar a estos límites? Y cuando hablamos de "Facebook" nos referimos a todas las redes sociales en general, pero puede que en esta se refleje de manera más clara y sencilla el fondo del artículo.


La respuesta debe ir direccionada hacia cómo se ha aprovechado esa información que se comparte para hacer negocio. El beneficio de estas compañías se ha generado en función de ingresos publicitarios, pero todos los negocios se han nutrido de la información y los datos de los usuarios para su propio interés. Las CRM (Customer Relationship Management) encuentran aquí infinidad de información pendiente de interpretar. Y el que mejor lo hace, mejor es. Y el que mejor la aplica a su negocio, más éxito logra.

 A pesar de que los usarios de las redes sociales no son conscientes a menudo de ello, están cediendo todos sus datos para que las empresas hagan negocio con ello. Y que nadie se lleve las manos a la cabeza, porque esto es legal y la mejor forma de innovar que tienen las empresas. Obtienen gustos, intereses, modas, etc. que analizan e interpretan para aplicar a sus productos o servicios, y todo ello de manera gratuita. Es la manera más rápida y eficiente de saber las necesidades del público, de posibles clientes, y todo ello con acceso a través de las tecnologías de la información y al alcance de la empresa más pequeña y joven o las grandes multinacionales y expertas.

Por todo ello, todos debemos reflexionar sobre el trasfondo de las redes sociales, las cuales usamos para entretenimiento, y debe seguir siendo el origen de las mismas, pero teniendo en cuenta que son fuentes generadoras de utilidad para el día a día. Si alguno está pensando en empezar un negocio, debería tener presente el mensaje...

5 comentarios:

Unknown dijo...

Estoy de acuerdo contigo Rubén, cada vez son más las empresas que se benefician de este mercado que se ha creado en el que nos encontramos la mayoría de nosotros.
Es una práctica muy común entre las empresas “intercambiarse” las bases de datos con el fin de que todas las empresas tengan información acerca de nuestros gustos, hobbies, situación familiar… con el fin de poder ofrecernos aquello que más se adapta a nuestro perfil.

Nahuel Callieri dijo...

Me gusto tu articulo, supongo que el debate se centra en cuanto en verdad nos están costando estos servicios "gratuitos" y si estamos en verdad dispuestos a pagarlo.

¿Mo molesta que las empresas sepan cosas personales sobre mi? No, si se utilizan para brindarme un mejor servicio y considere que no pueden utilizar en mi contra. Pero no descarto que mi opinión podria cambiar si alguna vez me viera afectado por este intercambio.

Unknown dijo...

Comparto vuestra opinión. Hoy en día los departamentos de marketing de las principales empresas mundiales, a la hora de hacer estudios de mercado, basan sus proyecciones en la información presente en las redes sociales

Paula Gonzalez dijo...

Creo que tienes mucha razón Rubén, a dia de hoy hay pocas fuentes de información más fácilmente accesibles que una red social. Dicha accesibilidad es la que debe hacer plantearnos que aquellas cosas de las que seamos celosos y no queramos que puedan llegar a determinados destinatarios (como un potencial empleador), no las publiquemos mediante dichas redes sociales de manera inocente.

Unknown dijo...

Seguramente estemos mucho más controlados de lo que pensamos pero a fín de cuentas todos usamos las redes sociales. El problema está en que tenemos que mentalizarnos que cualquier cosa que publiquemos puede caer en cualquier persona de cualquier parte del mundo así que tenemos que ser muy selectivos con la información que colgamos en las redes.