lunes, 24 de junio de 2013

Evolución de los teléfonos móviles, mejoran nuestra vida?



Los teléfonos móviles se han convertido en una necesidad para muchas personas en todo el mundo. La posibilidad de mantenernos en contacto con la familia, amigos, acceso al correo electrónico, estar conectados a las redes sociales… son sólo unas cuantas de las razones que explican la creciente importancia de nuestros queridos teléfonos móviles.

Pero no siempre estos dispositivos han sido accesibles para todo el mundo ya que estos eran aparatos de gran volumen (llegando incluso a ser necesario disponer de maletines para su uso con un peso superior a los 3 kilos), y de elevado coste (en los años 70 Motorola, sacó al mercado el DynaTAC 8000X siendo su precio de unos 4.000 dólares).

No fue hasta finales de la década de los 90 cuándo podemos hablar del despegue de la telefonía móvil para el público en general. En el gráfico adjunto podemos constatar dicha afirmación, que si bien representa únicamente datos sobre España, se pueden extrapolar las conclusiones a la totalidad de los países desarrollados.

Desde el momento en que el teléfono móvil se ha convertido en una parte de nuestra vida, ese pequeño aparato nos ha permitido simplificar y organizar nuestra manera de vivir. ¿Despertador? ¿Cámara de fotos? ¿Cámara de video? ¿Gps? Hemos conseguido reducir los aparatos necesarios en nuestra vida cotidiana. En nuestro pequeño móvil podemos reunir  muchos otros aparatos que hasta hace algunos años todos teníamos de manera individualizada, con la consiguiente ventaja de espacio o gestión de los mismos. En el futuro los teléfonos móviles también deben ser capaces de soportar el trabajo colectivo sobre aplicaciones distintas gracias a los ERP, por lo que dichos artilugios provocarán un tratamiento más eficiente de la información.

Sin embargo no todos son ventajas ya que, ¿quién no se ha encontrado con gente con completamente absorta con sus teléfonos móviles? El uso descontrolado del móvil puede provocar una desconexión importante de la realidad y un alto grado de dependencia del mismo. Muchos estudios también relevan los posibles aspectos negativos que puede tener en la salud un uso intensivo de nuestro móvil, como puede ser el favorecer la infertilidad, los tumores, o los problemas con el sueño. Existen evidencias científicas suficientes para afirmar que la radiación indiscriminada de microondas provocada por la telefonía móvil sobre la población tiene efectos para la salud pública.

Podemos concluir por tanto que la telefonía móvil es un proceso imparable y que no podemos evitar. En la medida en que los celulares sigan mejorando nuestras opciones de vida veremos como este tipo de tecnología llega a todos los lugares del mundo.

Sin embargo, como todo en la vida, los excesos y abusos siempre serán malos.

¿Teléfono móvil sí o no? Es una pregunta que no requiere ni de ser formulada, está siendo respondida a diario. El teléfono móvil es ya es una parte muy importante de nuestra vida, por lo que solo debemos evitar que se convierta en una parte imprescindible de la misma.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Me acuerdo todavía cuando los teléfonos móviles sólo se utilizaban para llamar y mandar SMSs...
Estoy de acuerdo en que hay veces que la gente se queda absorta mirando sus teléfonos, pero es que ya no son meros teléfonos, sino centros multimedia a los que es difícil resistirse. Esperemos que esta evolución no nos haga cada día más sociópatas e introvertidos.
Veremos...

Javier Lovaco dijo...

Dijo Einstein hace unos cuantos años "Temo el día en que la tecnología sobrepase nuestra humanidad: el mundo solo tendra una generacion de idiotas". Da miedo comprobar lo poquito que se ha equivocado...

Javier Morales dijo...

Interesante debate David, supongo que al final es como todo. Nada es malo mientras no se abuse de ello. La pregunta es ¿dónde está el límite?